Politica Internazionale

Politica Internazionale

Cerca nel blog

giovedì 30 marzo 2017

La propuesta de la Liga Árabe a Israel

Una oferta similar a Israel ya había sido hecha en 2002: la normalización de los países árabes en las relaciones con Israel a cambio de una solución permanente al problema de larga data entre israelíes y palestinos, incluyendo la creación de dos estados, a saber, la soberanía palestina, y el retorno a los territorios palestinos a ellos quitado con la guerra de ocupación que de 1967. Este es el significado del documento elaborado al final de la cumbre de la Liga árabe, que se celebra anualmente, y que se llevó a cabo en Jordania. La aprobación fue proporcionada por 21 representantes del Estado, de los 22 países de la Liga Árabe; Este documento, que fue alcanzado casi unanimidad señala la voluntad de los países árabes sunitas para cerrar el tema con Israel, para sancionar oficialmente las relaciones con Tel Aviv, que son extraoficialmente ya muy apretado, especialmente en vista de guerra contra el terrorismo y radical contra Irán, identificado como un adversario común. Visto en estos términos, la petición de la Liga Árabe que parece ser un mensaje conciliador aún más a Israel y, al mismo tiempo, para justificar de cara a la población árabe de las relaciones oficiales con Israel. La cuestión palestina, de hecho, para la percepción de la mayor parte de la sociedad árabe, representa siempre un patrón insalvable contraste y la aversión hacia el país de Israel, exacerbado por la dureza del tratamiento de la población de Palestina y la resta tierra ilegítimo, contra todos según el derecho internacional, los propios palestinos. Está claro que sin alcanzar estos objetivos los países árabes de la matriz sunita no pueden aparecer en frente de su tejido social y presentar a Israel como un nuevo aliado contra Teherán, y de hecho tal posición no es compatible con la resolución de la cuestión palestina, llegar a dar una ventaja quizá insalvable desde el punto de vista de la imagen, Irán, como el único baluarte contra la arrogancia de Israel. Probablemente, la división religiosa entre suníes y chiíes podría disminuir su valor si los sentimientos anti-Israel en el mundo árabe, que resultan de la falta de resolución de la cuestión palestina, se entregó. Este escenario también podría contribuir, entre otras cosas, un aumento del terrorismo suní dirigida contra Tel Aviv y sus aliados. Al mismo tiempo, el ofrecido por la Liga Árabe, es una oportunidad única de Tel Aviv, para llegar a la solución de un problema que la mayoría de la comunidad internacional ha estado pidiendo, y que permitiría a Israel a salir de un aislamiento perjudicial y abrazar una nueva perspectiva en las relaciones internacionales, especialmente en la región; además de tener una ventaja estratégica en contra de lo que hoy es el gobierno israelí considera el más peligroso enemigo: Irán. Por otro lado, la solución de dos estados es apoyada no sólo por gran parte de la comunidad internacional, incluidas las Naciones Unidas y el logro de este objetivo permitiría a Israel relaciones también mejoró con el actor supranacional líder en el mundo. Sin embargo, esta posibilidad no es, y no podía ser de otra manera, libre para Israel; El gobierno de Netanyahu debería cambiar su actitud acerca de la solución de dos estados y para iniciar un verdadero proceso para llegar a esta solución, que hasta ahora siempre se ha puesto en una equívoca y, quizás aún más difícil renunciar a la política de asentamientos expansionista. No es sólo para el gobierno de Tel Aviv, sino para el conjunto de toda la sociedad israelí para llevar a cabo un proceso de análisis profundo para evaluar una oferta que garantice la paz en el país y una consideración diferente de la comunidad internacional; sin duda una carrera de esta negociación potencial no podría llevarse a cabo como el que Netanyahu realizó con Kerry, pero debe ser guiada a la más absoluta sinceridad, sin maniobras cuando se acerque a los primeros planos y la expulsión, que han puesto en peligro el resultado agotado y la contraparte. Ahora la respuesta a la propuesta de la Liga Árabe, a continuación, toque a Israel, con la responsabilidad que una actitud negativa puede empeorar las relaciones con los estados sunitas, a pesar de la carretera está llevando a cabo actualmente, y que esto abre nuevos escenarios negativos en el Medio Oriente.

Nessun commento:

Posta un commento